Saymi Pinole, alcaldesa costeña de San Piter Pochutla, un gobierno relativamente positivo, que se había mostrado inclusive muy humano, sensible, ha cometido, de poco en poco, errores terribles, desde prácticas de anteriores regímenes corruptos, como el condicionamiento para la entrega de apoyos y recursos de programas, hasta las descaradas intenciones de abandonar el cargo para lanzarse como diputada o, en su defecto, intentar reelegirse.
Sus aspiraciones políticas, ya sea la de buscar la candidatura a una diputación local o federal, o reelegirse como presidenta, son totalmente válidas. Lo incongruente aquí es el condicionamiento de la entrega de recursos, que no le pertenecen, para afiliar a los necesitados como adeptos obligados e intentar garantizar el mayor número de votos… Eso lo hacía el PRI, y ahora el partido Morenaza da claras señales del afán cometer ese retroceso antidemocrático y mañoso, como en el Istmo, en que ya se creo el “FUCO” (Frente Unido Contra Oajacalifornia) que, financiado por gobiernos municipales del partido mencionado, ha comenzado también a afiliar adeptos obligados a cambio de entregarles sacos de cemento, láminas para tejados, despensas e inscribirlos en las listas de apoyos y becas.
Decepcionante la actitud mediocre de la edil de San Piter Pochutla: La actitud aparente humana y sensible de su gobierno era una fachada para ocultar su ambición.
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Sicarú guyee
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Mario Osiris Benavides Morin
*Catedrático de la Universalidad de Oaxacalifornia