Los normalistas cuestan al Estado 170 millones de pesos al año, son privilegiados, que además tienen asegurado sueldo y prestaciones que ningún otro trabajador tiene.

16/enero/22.

Como ya es costumbre, en temporada electoral los normalistas se movilizan, lo cual no es raro, pues personajes como Wilbert Santiago y Juan Gutiérrez, director del CRENO, han hecho junto con grupos porriles de la UABJO de esta época un espacio propio para enrarecer el ambiente político electoral y obtener beneficios personales.

Sus motivaciones son varias, la renovación de la dirigencia de la Sección 22, sus afinidades políticas y lo principal sus intereses económicos.

De: la red.

La agenda de atención según las autoridades no tiene pendiente, pues en los últimos 3 años se han contratado a más de 2 mil 500 egresados de estas escuelas, que a diferencia de los médicos, por ejemplo, acabando de estudiar tienen trabajo con prestaciones, como los 90 días de aguinaldo (que ningún otro trabajador tiene).

Para cumplir su objetivo violento y desestabilizador, el pretexto puede ser cualquier invento, como ya se ha visto, pueden inventar que se van a desaparecer las escuelas normales, inventar que no se les ha atendido o ahora, inventar que tienen derecho, sobre la Ley, a ser contratados sin haberse titulado.

Mientras tanto, la ciudadanía ya está harta de que los bajen de los camiones o los hagan caminar con bolsas en las manos.

La ciudadanía que con su pago de impuestos les han pagado su «educación» a estos parásitos del sistema y también les pagarán su sueldo quincenal; pues eso sí, seguramente serán contratados y pobres niños a quienes les darán clases.

Así, se concluye que no hay razón para la movilización, pues todo se les ha dado, lo que hay son intereses políticos por las elecciones.

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